LA LUZ QUE ME FUE NEGADA es una obra ambientada en Andalucía, en la que sus personajes, huyendo de su pasado, se encuentran en un mismo cortijo. Tras muchos años de convivencia, van abriéndose dejando al descubierto la opacidad de sus historias personales. La protagonista es una niña ciega, hija de la autoridad del pueblo, muy amigo de la única persona por la que se dejaba dominar: el señor Felipe, dueño del cortijo. Una burguesía forjada por los prejuicios sociales, que permite que la niña de 14 años viva experiencias dramáticas cuando los sentimientos del amor se despiertan en ella. La novela es una obra donde el amor se vive en todas sus facetas: las más aberrantes como el incesto, la violación o el acoso; pero también el amor más tierno y apasionado.