«Los buenos poemas se parecen a los espejos, permiten a quien los escribe y a quienes los leen contemplarse a sí mismos y a la vez lo que hay a su espalda. Los de Nerea Delgado son así, autobiográficos y ejemplificadores; tienen una onda a la vez clásica y moderna, porque su autora domina suertes características de la literatura, como el uso de la paradoja.» Benjamín Prado