Víctor del Árbol siempre ha practicado la escritura poética, sin darle difusión, como una emoción privada, y gracias a este, su primer libro de poemas, descubrimos una palabra clara y directa para abordar tanto los pequeños como los grandes temas de la vida (el amor, la infancia, la pérdid...), sentimientos y emociones de todo calibre, que se van dando con el paso de los años, a través de una sensibilidad y hondura que nos interpelan y nos retratan. Un verdadero hallazgo poético.