¿Qué hace de la naturaleza una referencia común y positiva para tantos afanes de renovación en la atribulada España de entresiglos? Frente a la amenaza de la decadencia nacional, bosques, campos y montes ofrecieron una contraimagen inocente y esperanzada. La naturaleza apareció una y otra vez entrelazada en los discursos de degeneración y regeneración, así como en las prácticas propugna-das o ensayadas por reformadores, ingenieros, urbanistas o pedagogos de todo signo. Este ensayo es un recorrido por las diversas formas científicas, culturales y sociales de redescubrimiento del entorno natural que se dieron en las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del siglo XX. Santos Casado revisa las lecturas identitarias del paisaje, la construcción científica de una imagen de la naturaleza nacional, los esfuerzos técnicos en torno a los bosques y otras riquezas naturales, las nuevas prácticas del excursionismo y el montañismo, la creación de los primeros parques nacionales o las innovaciones propugnadas por higienistas, naturistas y educadores, para ofrecer así una visión panorámica de los orígenes del prestigio cultural de la naturaleza en la España contemporánea.