Un joven maestro, católico y gay, que trabaja en un colegio concertado de ideario religioso, emprende un viaje grabando y transcribiendo consultas realizadas a decenas de sacerdotes de toda España en torno a su situación de pareja con una persona de su mismo sexo. El resultado revela, de una forma sorprendente, la impactante y radical división que genera la cuestión dentro del propio sacerdocio. En el transcurso de esas conversaciones, se producen las declaraciones de impacto mundial del papa Francisco en relación con los homosexuales «¿Quién soy yo para juzgarlos?», reflexión que se incorpora al diálogo con los sacerdotes consultados y, en especial, a la entrevista con un destacado arzobispo que culmina esta combativa búsqueda de orientación y esperanza.