En la Inglaterra del siglo xiv, Jonah Durham trabaja como aprendiz para su primo, el cruel y desalmado Rupert Hillock. Las condiciones de trabajo son durísimas, las injusticias se suceden y Jonah se da pronto cuenta de que sólo puede contar con su fuerza de voluntad para seguir adelante. Pero la herencia que recibe al morir su abuela abre nuevas expectativas en su vida y Jonah acabará convirtiéndose en una de las personas más poderosas del país.