Las especialidades técnicas se enfrentan a una peculiaridad añadida, y es que en muchas de las cuestiones a desarrollar se cae en el error de amasar expresiones algebraicas de fenómenos físicos o de comportamiento de sistemas y no se enfoca el tema respecto a su fin último o a las bases fundamentales del mismo. Desde luego, Sistemas Electrónicos no es en absoluto una especialidad que escape a este riesgo.
Es vital recordar que el tiempo es limitado y que los miembros del tribunal persiguen saber si el opositor sabe de qué trata el tema y no el análisis de un circuito concreto, que puede ser magistral, pero inadecuado. El análisis de un circuito o de varios ya se probará en la parte práctica. Esta prueba no es para eso y desde luego los miembros del tribunal no se detendrán en analizar circuitos electrónicos presentados por cada opositor con objeto de ver si se ha equivocado. Parece entonces más conveniente definir qué puede hacerse y apoyarse en algún dispositivo concreto (sólo ejemplificando) más que centrarse en él de forma extenuante.