Un único día se ha construido durante un largo período de tiempo en continuidad creativa y publicación periódica. Recoge y formaliza las dos épocas en que se ha dividido la obra poética de Jesús Hilario Tundidor. Teniendo ambas su identidad significada, cada uno de los dos volúmenes que forman nuestra edición tiene carácter original y propio.
El volumen primero aúna los libros cuyos temas trascienden la experiencia personal del escritor implicándola, bajo el argumento poemático, en la inmediatez vital e histórica que vive. Desarrollado en títulos que van desde Río oscuro hasta Pasiono, incluye, además, Junto a mi silencio (libro con el que obtuvo, por unanimidad, el Premio Adonais en 1962 dirigido entonces por José Luis Cano), Las hoces y los días y En voz baja. Los poemas de esta época, emocional y lingüísticamente en compromiso con una actitud vital de existencia y vida, nos arrastran en su lectura por la emoción viva que los envuelve y la palabra justa que los expresa. Este ciclo poco conocido hoy por estar agotadas o descatalogadas sus publicaciones, se edita ahora bajo el título de Borracho en los propileos con intención de obra orgánica y redacción definitiva que cierra, como libro bisagra, Tetraedro, ya que aún anunciando una nueva «manera», presenta estilísticas de una y otra etapa.
Repaso de un tiempo inmóvil, volumen dos, reúne y consolida la época segunda, integrada por: Libro de amor para Salónica, Repaso de un tiempo inmóvil, Tejedora de azar y Las llaves del reino. Desarrolla su temática en la dialéctica del hombre contemporáneo frente a sí mismo y frente a la colec tividad de la que forma parte, y supone una superación de la perplejidad lógica ante la defenestración de la realidad por las fuerzas oscuras del subconsciente, bajo los impulsos creadores, destructores y vitales de la imaginación creadora.
Para dar epílogo a Un único día, Tundidor incorpora un inédito: El holocausto de los huracanes. En él luz y clarividencia, sencillez y vida real, no concuerdan en simbiosis clarificadora con el ejercicio poético sino como lucha de opuestos en la estructuración intuitiva de la experiencia íntima a la cual concede significado la disposición del lenguaje en el poema. De este modo, el caos aparencial que conforma el referente desde los contenidos configuradores del absurdo, en la sorpresa de lo real y lo apocalíptico del referido, se transfigura en esperanza que funda y convierte la peculiaridad de su testimonio humano, y su temporalidad, en acontecimiento estético y biográfico que desvela la condición última del hombre.
La vida de Jesús Hilario Tundidor se ha edificado en intensas emociones vitales ante la realidad y el mundo, la participación en la misma vida y la subjetividad de su pensamiento. Ha vivido en varias capitales españolas y recorrido múltiples centros culturales e intelectuales dando recitales o conferencias. De capital importancia para su obra podemos citar, además de su ciudad natal y las tierras castellanas, las luminosas ciudades andaluzas, el Levante español y Madrid, donde reside actualmente.
Nace en Zamora (1935), estudia Magisterio y Geografía e Historia, y participa, posteriormente, en cursos de Filosofía y Literatura Contemporánea, así como de Matemática Moderna. En el Diccionario de la Literatura Española e Hispanoamericana, Ricardo Gullón manifiesta que la poesía de Tundidor se compone de «planteamientos de carácter experimental muy personales» y Francisco Umbral, en Poesía Española (1966), escribe comentando Las hoces y los días: «La poesía castellana [...] cuenta con un nuevo y difícil y personal creador» ya que Tundidor trae una aportación importante a los ámbitos principales de la poesía española de nuestro tiempo. Aportación que no puede pasarnos en modo alguno desapercibida por su riqueza contextual, su certero lenguaje y su intuición de los estratos más profundos de la realidad sensible y reflexiva del pensamiento.
Como se preveía ya desde la publicación de Junto a mi silencio, su poesía se ha elaborado «desde experiencias personales cognoscitivas, vitales y reflexivas, que inciden en los impulsos creadores como plenitud emocional y enriquecimiento de una visión propia y original del mundo. Visión que se ofrece a través de imágenes y metáforas de significado múltiple, con posibilidades operativas de selección, transcendencia y adecuación a las fajas más emotivas de la subconsciencia». Esto supone una poética que se genera a partir de la realidad vivida, significada en la escritura por procesos intuitivos de selección lingüística que connotan la búsqueda permanente del sentido profundo de nuestra existencia.
El Instituto Castellano y Leonés de la Lengua acaba de editar Inventario de Jesús Hilario Tundidor: Las voces y los libros, que incluye, además de un estudio de cada uno de sus libros, estudios generales o parciales de sus escritos, biobibliografía, bibliografía de edición y crítica y un dvd, Como si fuese niebla, sobre la vida y obra del poeta. Obra necesaria para conocer el perfil humano y crítico de este poeta.